El espectro de vinos bajo los $5.000 es tan amplio, que fue una tarea difícil escoger a los más destacados. Una de las ventajas de vivir en Chile para los entusiastas del vino, es que con poca cantidad de dinero, es posible llevarse pequeños tesoros dentro de una botella. Viñas hay muchas y las opciones van desde los tradicionales botellones hasta vinos muy bien cuidados de pequeños viñedos que buscan destacarse por precio –al menos en primera instancia– para luego sorprende en calidad y sabor.
Seleccionamos vinos de distintas cepas y todos ellos pueden ser adquiridos en tiendas especializadas así como en supermercados, donde usualmente los encontramos tímidamente en las góndolas inferiores.
Para entrar al mundo de los orgánicos: Merlot Orgánico, Viña las Niñas: Una de mis viñas favoritas para regalar a quienes están iniciándose en el vino y temen arriesgarse con una viña que puede sonar nueva, a pesar de tener casi 20 años en el mercado.
Con hidratación hídrica en 160 hectáreas, Viña Las Niñas crea en su Merlot Orgánico, vino frutoso y fresco realizado con cepas cosechadas a mano durante los primeros días de abril.
Directo desde el valle de Colchagua e ideal para acompañar platos de legumbres, pato, conejo y quesos semiduros a un valor referencial $4.500
Ligero y amargo: Sauvignon Blanc 2014, Bisquertt Petirrojo: Blancos hay muchos y bajo la barrera de los $5.000 aún más, pero eso no quita que algunos destaquen por sobre otros. Eso es lo que pasa con el blanco de Petirrojo, un vino delicioso y muy ligero de sabor con un amargo en su punto. Es ideal para maridar con verduras salteadas, disfrutar en día soleado y simplemente premiarse por terminar la jornada.
Precio de referencia $3.990
Al rosado con cariño: Pink Goat Rosé, Viña Tamaya: El Valle del Limarí es un destino único, y sus vinos también tienen una singularidad especial que se representa muy bien en este en particular: delicado y con toques de granadina, guinda y miel, permitiéndole transformarse en el mejor compañero de pastas frescas y una tabla de quesos junto con jamón serrano o aceitunas.
Lo puedes comprar a un precio referencial de $4.990
Dentro de las cepas nobles en el Maipo: Azimut Cero, Cabernet Sauvignon 2013: Azimut Cero es un Cabernet Sauvignon que reúne condiciones maravillosas para quienes se están adentrando a conocer más del vino.
Producido en suelos de baja fertilidad y con uvas cosechadas a mano, es mantenido durante nueve meses en barricas nuevas de encinas francesas, entregándole un color rubí intenso que se mezcla de la mejor forma con los aromas a frutos rojos, con frutillas y ciruelas.
Este vino, que se vende generalmente en el retail en formato doble tiene un costo de $4.990 por ambas botellas.
Del mar a la vid: Sauvignon Blanc Tatio, Viña San Vicente: Una de las mejores sorpresas que me he llevado aprovechando las señales de oferta del supermercado de mi barrio. La Viña San Vicente pone en una botella un tesoro equilibrado en sabor y acidez, un vino desde el Valle del Maule que llamar a gritos una preparación de una reineta al horno o bien un plato de machas a la parmesana. Para mí, un gran vino de aperitivo.
Valor referencial $3.500
Un clásico nacional: Carmeneré, Viña La Rosa: Con casi 190 años de funcionamiento, Viña las Rosas presenta desde el Valle del Cachapoal su Carmenere, un vino de rojo violeta intenso que deja sentir aromas y sabores como ciruelas, moras y chocolate, con una acidez suave que lo hace perfecto para disfrutar a temperatura ambiente, junto a una tabla de quesos o bien cortes de vacuno o cordero.
Lo puedes comprar en diversos supermercados y tiendas especializadas a $3.900